Pero lo más importante es que un entorno tan amplio cuenta, a su vez, con la máxima seguridad. La zona deportiva está perfectamente acotada y la piscina cuenta con espacios independientes según la edad de los participantes. Además, los niños no sólo están vigilados en todo momento por los socorristas, sino que cada monitor de las Escuelas de Verano (perfectamente titulado) es el responsable directo de un grupo con un máximo de 15 niños/as. Y todos ellos/as están bajo la supervisión constante del director de la Escuela de Verano.
El propio director es quien recibirá todos los días a los participantes a partir de las 08´00 de la mañana. En este sentido, el Parque de Benicalap tiene fácil acceso en las inmediaciones para que los padres y madres puedan llevar y recoger a sus hijos/as con la mayor tranquilidad.
Pero si el Parque de Benicalap está demasiado lejos de tu domicilio, también puedes acudir a la Escuela de Verano de Benimaclet. En esta Escuela quedan plazas disponibles en las Semanas 1 y 6.